Los efectos en el Derecho laboral causados por el Brexit
Cuando el período de transición terminó el 31 de diciembre de 2020, las disposiciones del acuerdo de retirada tuvieron repercusiones prácticas en la legislación laboral.
En general, las libertades fundamentales han seguido aplicándose si ya se han ejercido antes de que finalice el período de transición.
Por lo tanto, se mantendrá la libertad de circulación de los trabajadores ya ejercida.
Esto irá acompañado de un trato igualitario, no discriminatorio y de la protección de los miembros de las familias de los trabajadores. Se incluyen disposiciones similares para los trabajadores por cuenta propia que se hayan establecido en el otro territorio o que trabajen allí como trabajadores fronterizos.
La situación de la seguridad social también permanece esencialmente inalterada, mientras los ciudadanos de la UE o del Reino Unido sigan ejerciendo sus libertades fundamentales.
El principio de que las libertades fundamentales siguen siendo aplicables si ya se han ejercido antes de que finalice el período de transición no se extiende a la libertad de prestación de servicios.
Si bien la directiva enmendada para los trabajadores desplazados dará lugar a condiciones salariales esencialmente iguales dentro de la Unión Europea para los trabajadores desplazados de otros Estados miembros, el Reino Unido ya no estará obligado a aplicar condiciones mínimas a los trabajadores de la Unión Europea después del período de transición.
Además, como el Reino Unido ya no estará obligado por la norma de conflicto de leyes, no estará claro qué ley se aplicará cuando un trabajador sea desplazado temporalmente de la UE al Reino Unido o del Reino Unido a un Estado miembro de la UE hasta que se celebre un nuevo acuerdo.
A menos que la UE y el Reino Unido acuerden otra cosa, los ciudadanos de la UE que deseen empezar a trabajar en el Reino Unido cuando haya terminado el período de transición tendrán que cumplir las condiciones que se aplican actualmente a los nacionales de terceros países para obtener un permiso de residencia y de trabajo. Estas condiciones son comparativamente estrictas a fin de atraer a personas altamente calificadas y de altos ingresos.
En el caso de que no haya acuerdo, un reglamento de la UE prevé medidas de contingencia relativas a la coordinación de la seguridad social. Por ejemplo, los empleados que hayan tenido una carrera internacional y hayan cotizado a diversos planes de pensiones de la UE antes de Brexit deberían poder sumar sus derechos para el cálculo de su asignación de pensión de las autoridades de pensiones del Estado miembro en el que decidan jubilarse.
Además, los Estados miembros de la UE ya han introducido proyectos de medidas de transición para asegurar la situación de los ciudadanos del Reino Unido que trabajan y/o viven en la UE de forma permanente. En algunos casos, estas medidas están sujetas a una condición de reciprocidad con el Reino Unido.
Este artículo fue escrito en diciembre de 2020
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