El cambio climático importa. Los despachos de abogados han demostrado su capacidad por mostrarse a los nuevos tiempos, desde el punto de vista tecnológico, así como a nivel organizativo, con los retos traidos por la pandemia. El cuidado del medioambiente es un deber que hemos de adquirir como ciudadanos del planeta, y las firmas apoyan este objetivo que tiene carácter global. En The Impact Lawyers hemos realizado un breve estudio sobre las acciones que están llevando a cabo importantes firmas legales, así como que tratamos de descubrir qué retos son los que más les preocupa. 

Hogan Lovells

El despacho británico proporciona financiación y apoyo pro-bono a cuatro grandes organizaciones europeas para un proyecto de reforestación.

En 2019, la firma comenzó a cofinanciar un proyecto de reforestación en apoyo de una cooperativa indígena con sede en Finlandia, Snowchange. Su objetivo era preservar la vida silvestre y la biodiversidad mediante hábitos de vida ecológicos y sostenibles. 

Además de prestar un apoyo financiero de más de 75.000 euros y asesoramiento legal pro-bono a esta cooperativa finlandesa, Hogan Lovells ha suscrito durante el último año compromisos de reforestación en los proyectos Rewilding Europe, Rewilding Britan y The Wildlife Trust.

Esta iniciativa de reforestación ha sido promovida por socios de Hogan Lovells ubicados en diferentes oficinas: Philip Brown (Londres), Manon Cordewener (Ámsterdam) y Mikael Salmela (París). 

"Nos enfrentamos a los impactos catastróficos del cambio climático y la pérdida de biodiversidad. No hay soluciones técnicas rápidas para estos problemas, pero podemos trabajar con el inmenso poder restaurador de la naturaleza", dice Susan Bright, socia directora global de Hogan Lovells para Diversidad e Inclusión y Negocios Responsables. "Nuestras grandes organizaciones asociadas supervisan y evalúan sistemáticamente los efectos de restauración de sus proyectos de rewilding del paisaje para crear ecosistemas funcionales en los que prospere la biodiversidad".

Esta iniciativa promovida por Hogan Lovells es original y está consiguiendo muy buenos resultados. 

"Realmente creo que, como institución, podemos hacer más por el cambio climático y ser más responsables en la forma de llevar a cabo nuestro negocio. Queremos ser líderes en sostenibilidad y protección del medio ambiente", afirma Miguel Zaldívar, director general de la firma.

Pinsent Masons

Pinsent Masons también está preocupado por el cambio climático. El despacho, también de origen británico, se ha adherido a un proyecto, promovido por un grupo de trabajo independiente del Reino Unido ("Achieving Net Zero Cross-Industry Working Group"), que pretende animar a las empresas de los sectores de la construcción y las infraestructuras a cumplir los compromisos asociados a la reducción del uso del carbono a cero.

El proyecto se enmarca en un código de buenas prácticas en el que se recogen los compromisos básicos y adicionales de las empresas que trabajan en los sectores mencionados. El objetivo primordial de este proyecto es reducir completamente las emisiones directas e indirectas de carbono para 2045. Para 2030 se prevén otras reducciones totales.

Por ello, Pinsent Masons se une a este proyecto a través de la convocatoria del Centro de Infraestructuras y Construcción Inteligentes de Cambridge (CSIC) en marzo de 2020. Este grupo de trabajo se centra en la reducción de las emisiones de carbono relacionadas con el diseño, la construcción, el mantenimiento y el funcionamiento de los activos construidos.

Así, la firma británica se compromete a incluir en los contratos párrafos informativos sobre los efectos negativos causados por el uso del carbono y el establecimiento de limitaciones en el uso de este mineral para nuevos proyectos. 

Además, Pinsent Masons se compromete a elaborar informes sobre el carbono con el que operan y el compromiso de reducir su uso en sus operaciones. Esto incluye el establecimiento de medidas y protocolos para reducir su uso.

Linklaters

Consciente de la importancia del cambio climático en las agendas de muchos gobiernos internacionales, Linklaters es consciente de su papel como promotor del cuidado del medio ambiente.

La firma asesora a sus clientes en materia de regulación climática (reducción de la contaminación, eficiencia económica, entre otras tareas). También establece requisitos comerciales para las evaluaciones del cambio climático. 

Para sus clientes, Linklaters les apoya en la búsqueda de mecanismos para analizar y evaluar su impacto en el cambio climático y su impacto ambiental a través del uso del carbono. 

Linklaters participa activamente en estudios sobre emisiones nocivas para el medio ambiente, así como en la elaboración de análisis de asesoramiento y sostenibilidad y en la regulación normativa sobre las emisiones de gases y la aplicación del carbono.

En materia de reforestación, el despacho participa en un proyecto en la República Democrática del Congo, el primero sobre mecanismos de desarrollo forestal sostenible en África. 

Herbert Smith Freehills

Herbert Smith Freehills se ha comprometido a cumplir los requisitos del Acuerdo de París de 2015. 

Entre sus principales compromisos con el medio ambiente, uno de los más importantes es la reducción de las emisiones de carbono para el año 2030, cuyo objetivo es evitar que la temperatura media del planeta supere los 1,5º. 

La empresa está impulsando su compromiso activo con la reducción de las emisiones de carbono y distingue entre los términos "carbono neutral" y "carbono neto cero".

Carbono neutro significa aplicar un equilibrio de las emisiones de gases de efecto invernadero mediante un sistema de compensación que consiste en eliminar de la atmósfera una cantidad de carbono similar a la que se produce.

Esto puede lograrse comprando "créditos de carbono" -en esencia, permiso para emitir dióxido de carbono u otro gas de efecto invernadero a cambio de compensar los efectos de esas emisiones- y/o apoyando iniciativas de reducción de GEI, como proyectos de energías renovables.

Una empresa neutra en carbono sólo tiene que compensar las emisiones de GEI que produce, aunque esas emisiones aumenten.

En cuanto al carbono neto cero, significa reducir a cero las emisiones de gases de efecto invernadero y, por tanto, eliminarlas de la atmósfera. 

La opinión del bufete es que una empresa que produce emisiones perjudiciales para el planeta debe apoyar proyectos de energías renovables para compensar las emisiones.

Cleary Gottlieb

La práctica global de Cleary Gottlieb entiende las formas en que la sostenibilidad y las cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) se han convertido en importantes impulsores estratégicos de las organizaciones globales, las empresas, las instituciones financieras y los inversores.

La firma ha estado a la vanguardia de los desarrollos legales, regulatorios y políticos en esta área, tanto históricamente como en medio de los llamados a una recuperación sostenible después de la pandemia. Incorporan las consideraciones de sostenibilidad y ASG de forma holística en todas nuestras áreas de práctica, ayudando a los clientes a alcanzar sus objetivos de sostenibilidad y a adaptarse a un entorno empresarial en evolución.

El equipo interdisciplinario de Cleary aporta perspectivas, conocimientos y experiencia complementarios a estos asuntos, proporcionando asesoramiento práctico en un amplio espectro de cuestiones como el Derecho de la competencia sostenible, los marcos regulatorios de la sostenibilidad, la financiación sostenible y la captación de capital, los litigios, el arbitraje y la gestión de conflictos relacionados con los derechos humanos, el cambio climático y otras cuestiones medioambientales, los proyectos de inversión ecológica, las adquisiciones, las inversiones y los fondos de inversión, y la estrategia y los conflictos fiscales, incluidos los asuntos relacionados con los impuestos sobre el carbono.

Su experiencia también incluye el compromiso con las partes interesadas en cuestiones de sostenibilidad, incluidos los reguladores en temas como la sostenibilidad en el derecho de la competencia y el riesgo sistémico del cambio climático.

Orrick

Orrick es el primer despacho de abogados del mundo en crear un departamento de financiación e inversión de impacto, liderando el sector al apoyar a los inversores y empresarios que pretenden lograr un impacto social y medioambiental junto con un rendimiento financiero.

En colaboración con Blue Forest Conservation, introdujeron el primer Bono de Resiliencia Forestal (FRB, por sus siglas en inglés) del país para permitir a los inversores privados orientados a la sostenibilidad financiar la restauración de los bosques. Utilizando una estructura innovadora, el FRB está ayudando a hacer frente a los catastróficos incendios forestales de California. El FRB piloto de Blue Forest para el Proyecto Yuba permitirá reducir el uso de combustibles y realizar quemas prescritas, protegiendo 14.500 acres en el Bosque Nacional de Tahoe.

Apoyan el amplio objetivo social de aumentar la calidad de vida de las personas en todas las partes del mundo. Su práctica de financiación e inversión de impacto ayuda a las organizaciones que trabajan para mejorar las condiciones y los resultados en muchos sectores. Con sus clientes, ayudan a las comunidades a acceder al empleo, la financiación, la vivienda asequible, la educación, la asistencia sanitaria, el agua y los ecosistemas sostenibles, la tecnología de saneamiento y la energía.

Han ayudado a clientes de todo el mundo a lograr un impacto social significativo y medible y han asesorado a Goldman Sachs y a la Fundación Calvert en el primer Bono de Impacto Ambiental del país, emitido por la Autoridad de Agua y Alcantarillado del Distrito de Columbia para financiar infraestructuras verdes y ayudar a mejorar la calidad del agua del Distrito. Ayudó a LeapFrog Investments Group, un inversor con ánimo de lucro en mercados emergentes, en su inversión de 180 millones de dólares en la mayor aseguradora de Ghana y la primera que cotiza en bolsa, Enterprise Group.

Ayudó también a Calvert Impact Capital a lanzar Benefit Chicago, una colaboración con la Fundación MacArthur y Chicago Community Trust para invertir 100 millones de dólares en organizaciones sin ánimo de lucro y empresas sociales que trabajan en la región de Chicago. El capital proporcionará préstamos a bajo interés y otras inversiones para acelerar los esfuerzos de las organizaciones locales del sector social que trabajan para abordar prioridades clave, como la educación y el cuidado de los niños, el acceso a alimentos saludables, la vivienda asequible de calidad, la conservación de la energía, la creación de empleo y la formación, entre otras. Además, han actuado para Omidyar Network en sus inversiones en empresarios que comparten su compromiso con el avance del bien social.

Skadden

Skadden pretende reducir su huella de carbono en al menos un 25% en la próxima década. Pretenden alcanzar este objetivo manteniendo su compromiso activo con los esfuerzos de sostenibilidad y trabajando estrechamente con expertos para desarrollar nuevos enfoques que limiten sus principales fuentes de emisiones, como el uso de electricidad, los viajes en avión y el uso de papel. También seguirán colaborando con sus abogados, personal profesional, clientes, comunidades y otros despachos de abogados para lograr el cambio fuera de su empresa, a través de servicios públicos y gratuitos.

Se han comprometido a ayudar a mitigar las graves consecuencias del cambio climático disminuyendo el impacto de sus operaciones globales y asociándose con sus clientes, proveedores y comunidades para apoyar un cambio positivo en las prácticas de sostenibilidad.

Su equipo ecológico global investiga y coordina las mejores prácticas para reducir los residuos y cumplir los objetivos de la huella de carbono. El equipo se dirige regularmente a los abogados y al personal profesional para concienciarlos, compartir consejos para marcar la diferencia e invitarlos a participar en proyectos medioambientales dentro de la empresa y de sus comunidades locales.

Buscan regularmente formas de compartir y aplicar las mejores prácticas con los clientes que tienen un compromiso similar con la sostenibilidad; los esfuerzos recientes incluyen el desarrollo de estrategias para reducir los viajes en avión de sus equipos, reduciendo así sus resíduos. La empresa también incorpora la sostenibilidad en la toma de decisiones de sus proveedores.

Squire Patton Boggs

Squire Patton Boggs trata de reducir la contaminación tanto de forma directa como indirecta en cada una de sus actividades, llevando a cabo estrategias sostenibles en cada una de sus operaciones diarias, utilizando productos sostenibles e implementando acciones positivas hacia el medio ambiente, como la reducción de las horas de consumo de energía o evitando desplazamientos innecesarios.

Además, esta firma internacional promueve la economía circular y establece procedimientos que evitan el desperdicio de materiales y materiales, y fomentan su reutilización, controlando así el macroconsumo y optimizando el uso del material de oficina. 

Vinculado a la reducción de la contaminación, Squire Patton Boggs colabora con entidades locales, apoyando a comunidades locales concretas, seleccionando un consumo adecuado y responsable.

El despacho trata de obtener certificaciones y acreditaciones medioambientales en los distintos países en los que ha establecido oficinas y en los que colabora con clientes. Por ejemplo, en el Reino Unido, Squire está tratando de obtener la certificación ISO 14001, que demuestra que el bufete está comprometido con la protección del medio ambiente mediante la gestión de los riesgos medioambientales asociados a sus actividades.

Baker McKenzie

Baker McKenzie está comprometido con los ODS y se esfuerza por integrar la sostenibilidad medioambiental de forma significativa en sus estrategias de negocio y modelos operativos.

Contribuye a la sostenibilidad medioambiental a través de asociaciones estratégicas, iniciativas pro bono y de servicio a la comunidad, y sus departamentos centrados en el medio ambiente y la energía.

Sus profesionales jurídicos y asesores expertos en energías renovables contribuyen a la iniciativa Open Solar Contracts, cuyo objetivo es acelerar el despliegue de la energía solar en todo el mundo proporcionando un conjunto de contratos estandarizados que ayudan a reducir la complejidad y aumentar la eficiencia de las transacciones de energía solar.

Baker McKenzie está comprometido con el uso de hidrógeno limpio. Este material es crucial para la eliminación del uso del carbón, ya que actualmente los países no pueden sostenerse únicamente mediante el uso de energías renovables. El uso generalizado del hidrógeno contribuirá a reducir la huella del carbón, así como a rebajar las tarifas del mismo.

El despacho propone estrategias en línea con los puntos acordados en el Acuerdo Climático de París. El bufete trata de mejorar su rendimiento medioambiental en todas sus operaciones, a través de su Iniciativa de Reuniones Más Ecológicas, así como su compromiso de desarrollar una estrategia de viajes aéreos de negocios y su Programa de Compensación de Carbono.

Addleshaw Goddard

La empresa británica se esfuerza por cuidar el medio ambiente:

- Energía: La empresa ha reducido el uso de energía en sus oficinas del Reino Unido en un 30%.

- Residuos: La firma ha reducido, de media, un 39% de sus residuos en sus oficinas del Reino Unido.

- Viajes: La empresa ha reducido en un 94% el número de desplazamientos de sus empleados por motivos de trabajo. A su vez, la firma ha reducido la impresión de billetes de tren de unos 20.000 (2019) a 120 (2020). 

- Papel: La firma redujo el uso de papel en sus oficinas del Reino Unido en un 21%.

La firma también se ha comprometido a reducir el plástico promoviendo el uso de otros materiales dentro de sus oficinas. Inicialmente apoyó esta medida con el uso de vajilla y cubiertos en sus cafeterías, y cuando comenzó la pandemia, generalizó el uso de cubiertos y fiambreras biodegradables.

Al mismo tiempo, Addleshaw se encarga de los procesos de reciclaje de los materiales habituales de la oficina: botellas de plástico, cartuchos de impresora, pilas, cápsulas de café, bolsas de té, bolígrafos, entre otros.

Los retos futuros son reducir las emisiones de los desplazamientos internos en un 50% (en comparación con los desplazamientos entre 2019 y 2020), eliminar todo el plástico no reciclable en su catering y conseguir la acreditación de Carbono Neutral para 2024.